Me he pensado mucho el poner esta ruta en el blog porque está más que documentada, si se busca un poco en Google por ejemplo, aparecen muchos enlaces con variaciones ya sean más largas o más cortas, con fotografías impactantes, con mapas, con gps, etc, por lo que poco más puedo decir. Pero también creo que no hay dos rutas iguales, que todas son vivencias individuales y que cada una de ellas aporta algo nuevo así que, ¿por qué no?
No voy a decir nada original si empiezo con que la Serrella es una de las sierras más impresionantes de Alicante, con alturas superiores a los 1000 metros, que combina a la perfección ascensiones fáciles y complicadas, que esconde entre sus cimas un pequeño bosque de pinos, pozos de nieve, suaves pistas y estrechos senderos, fuentes, pedreras y un paraje único, los Frares, un conjunto de agujas de piedra que se extienden por la cara norte de la sierra. Mágico, esa es la definición que merece este paraje, mágico.
La idea de hacer esta travesía salió de una de nuestras visitas a este último rincón, los Frares, al mirar hacia la gran pedrera que sube hacia lo alto de la sierra nos fijamos en algo que parecía un sendero…..parece que se puede subir por aquí, pero entonces empiezan las inevitables preguntas ¿Cómo se llega? ¿es accesible? ¿Dónde acaba? ¿por donde se puede volver?, preguntas y más preguntas que solo puede resolver si conoces a algún veterano y aguerrido montañero que haya pateado esas mismas pedreras, o si encuentras crónicas o publicaciones donde se pueda consultar o, por último, si coges la mochila y te pones recorrer la zona por tu cuenta y riesgo.
La ruta que hoy describo es una circular, partiendo desde Quatretondeta, Font del Espinal, Frares, Peña les Creus, Serrella, Font Roja, Quatretondeta. No forma parte de ningún PRV señalizado aunque aprovechamos algún tramo de alguno de ellos. Como ya he comentado hay muchas variaciones, tanto en recorrido como en dificultad, pero esta es una propuesta que me parece más asequible, sin castigar excesivamente el cuerpo y disfrutando a la vez de este paraje.
Preparación, ante todo preparación, eso es lo que me digo siempre y en realidad soy un improvisador, pero bueno, la intención es lo que cuenta. Mapas de la zona como el que edita el Ministerio de Fomento, páginas web como http://casiaventurilla-sensei2.blogspot.com/2011/02/senderismo-en-la-serrella-els-frares-de.html y http://trotasendas.blogspot.com/2011/02/circular-frailes-de-quatretondeta-pico_23.html, dos estupendas crónicas bien documentadas y presentadas, y un mes subiendo hasta el puerto del Maigmó en bici intentando recuperar la forma física. Queda bien lo de un mes, jajaja, en realidad son 3 ó 4 salidas dominicales.
La Ruta empieza en Quatretondeta, justo nada más pasar el pueblo si vienes desde Alcoy encuentras una pista hacía la derecha con indicadores de PRV, la cogemos, llegamos a un depósito de agua y aquí el camino se ensancha un poco donde podemos aparcar.
Seguimos por la ruta, esta vez a pie, marcada con las señales de PRV, llegamos hasta un rincón inconfundible, la Carrasca de Doña Sofía, allí nos desviamos hacia la izquierda. La pista, en algún tramo un tanto deteriorada (lo digo por si alguien quiere hacerla en coche), sigue entre huertos de olivo y almendro, pasaremos al lado de una pequeña caseta.
Llegaremos a la Font del Espinal con su típico e imposible almendro apuntalado, en algunos mapas aparece con el nombre de Font dels Frares, una fuente donde podemos abastecernos de agua fresca y prepararnos para la fuerte ascensión que nos espera.
Aquí acaba la pista y empieza el sendero que seguimos entre pinos, nos encontraremos con varios paneles informativos y con las marcas de prv. Se acaba la vegetación y andamos por pedrera hasta llegar a un panel, allí el sendero se bifurca, si seguimos recto nos llevaría hacia el Pla de la Casa por el PRV y hacia la derecha a los Frares, cogemos esta última dirección. Nos encontramos fuera del PRV y por tanto y hasta nueva orden, no vamos a encontrar más marcas blancas y amarillas.
Vamos atravesando pedreras en paralelo a la cima sin mucha complicación hasta llegar a la Cova Foradá, una gran y característica cavidad mas que cueva,allí el camino se pierde por momentos y se complica, no subimos a la Cova, a no ser que no podamos evitarlo o nos guste mucho o no la hemos visto nunca. Seguimos como podamos, el sendero se esconde, se llena de rosales y ramas. Casi de inmediato aparecen dos colosales Frares que a modo de puerta nos reciben.
Ascendemos entre ellos, la pendiente es fuerte, nos vamos desviando hacia la derecha, estamos en lo profundo de los Frares. Seguimos por la senda y nos encontramos con una pedrera que acaba en una caída vertiginosa, hay que atravesarla por el sendero que se marca a través de ella prestando mucha atención, es un tramo complicado, no ya por la altura y por el peligro de un traspiés, también porque la senda puede estar deteriorada como fue en este caso, estamos pasando por un firme que no es nada firme.
Pasada la pedrera con la dosis de adrenalina que supone nos ponemos a buscar otra vez la senda que no está apenas marcada. Ahora hacia nuestra izquierda y subiendo en zigzag entre matorrales, algún pino y carrasca, adivinando e intuyendo la ruta con ayuda de algún que otro hito, por un literalmente camino de cabras. Me reía mientras iba subiendo al ver pisadas y otras señales más orgánicas de bóvidos pensaba, todas las cabras pasan sin problemas por los caminos de los humanos pero no todos los humanos pueden caminar por uno de cabras, jajaja…¡a ver como resulta este!
Al cabo de un rato de subir y subir nos topamos casi de repente con una pared de piedra de unos 2 ó 3 metros, aquí parece que acaba el camino,en la documentación que había consultadome sonaba que había que trepar,….pero ¿sería por aquí? puñetero improvisador, ¿por qué no tomé notas y sobre todo por qué no las traje? ahora vienen los reproches, XD.
De todas maneras la lógica se impone, el camino parece acabar aquí, a un lado está el barranco, al otro una pedrera camuflada entre vegetación, y si miras para abajo….te das cuenta de que mejor subes.
Se trepa por la pared, no tiene mucha dificultad, una vez pasado el obstáculo, vuelve a aparecer el camino (de cabras) que sigue zigzagueando por la pendiente, a veces parece que me pierdo pues no es nada claro y tengo que retroceder un par de pasos. Pasamos al lado de una cueva que queda un poco arriba y hacia la izquierda. Esto me suena de haberlo leído, voy por buen camino.
La pendiente poco a poco se va suavizando y nos encontramos una última rampa que invita a cogerla casi corriendo, ya estamos intuyendo el final, pero mejor no, hay unas marcas rojas que nos indican un pequeño desvío hacia la derecha, subimos por ahí sorteando la fuerte rampa y llegamos arriba.
Nos quedamos cerca de la Penya Creus, que aparece a nuestra izquierda, aquí ya no hay camino sencillamente nos ponemos a andar entre carrascas buscando cumbre a la que llegamos al poco tiempo.
El panorama desde la cima es espectacular, el bosque de pinos que la cubre, los picos del Heura, de Serrella, el Pla de la Casa, asomarse a contemplar la tremenda pendiente que acabas de superar, el valle del Zeta, las nubes que pasan a tu misma altura…vale la pena.
El siguiente objetivo es Serrella, nos queda hacia el Oeste, bajamos por los pinos, pasamos la pista y subimos un poco por la ladera opuesta, buscamos cualquiera de los senderos que surcan este tramo y lo tomamos en dirección Oeste/derecha, nos internamos otra vez en el bosque de pinos y buscamos el camino que nos lleva hasta lo alto de Serrella a la que llegamos al poco rato. Un último tramo delimitado por vallas de madera y cuerda y accedemos a la cumbre, con la caseta del guarda forestal, el vértice geodésico y un paisaje para disfrutar con tiempo.
Después de comer, reponer fuerzas y machacar la cámara de fotos bajamos por el mismo camino hasta llegar al cruce, ahora cogemos la pista hacia la derecha, vamos a bajar por la vertiente opuesta a la que hemos subido, salimos del bosque de pinos, alternamos tramos de hormigón y de tierra hasta llegar a un depósito de agua.
Desde este depósito sale otra pista hacia la izquierda en el sentido de la marcha, una parte cómoda con la curiosidad de caminar entre pinos de dos especies diferentes y que acaba en la Font Roja, un área acondicionada con una fuente, una caseta un par de mesas y un abrevadero para ganado, también tenemos problemas con los nombres aquí, en algún sitio aparece con el nombre del Font del Cirer ¿?. Desde aquí parten varios senderos, Facheca, Pla de la Casa,…., Quatretondeta, ese es el que nos interesa, fácil de reconocer porque sigue la conducción de agua que abastece el pueblo.
Volvemos a recorrer parajes que nos son conocidos y que hemos recorrido unas horas antes, estamos en la cara norte de la sierra y pasamos por al lado del cartel informativo desde donde parte la pista hacia los Frares, nos internamos en el bosquecillo de pinos que hacen de antesala a la Font del Espinal, desde allí hasta la encina de Doña Sofia y un poco más y llegamos donde unas horas antes dejamos el coche.
Es una ruta difícil, requiere estar en buena forma física y tiene zonas complicadas, hay muchas alternativas que se pueden hacer, en la web se pueden encontrar alguna de ellas, subir y llegarnos al Heura y bajar por allí hasta el Pla de la Casa, subir a este último por el desvío que hay antes de la Font Roja, etc, por lo que dependiendo de las ganas se puede endurecer o alargar a voluntad.
Solo una recomendación, precaución y sobre todo sentido común. Si no estamos habituados a la montaña más vale coger otra ruta alternativa más sencilla que las hay en la misma Serrella. Y si nos acompañan la novia/o, pariente/s, amigos/as que nos aseguran que “van mucho al campo” (mala señal, eso del campo es sospechoso XD) e incluso que subieron una vez al Maigmó pero no te lo acabas de creer y queremos evitar problemas como ataques de vértigo, de pánico o simplemente alguna pájara, y sabiendo que no puedes dejar solo a nadie en plena cuesta (…espéranos aquí, tú no te asustes, vale?) y que volver a bajar puede resultar igual o más complicado que subir….pues para estos casosmejor cogemos la pista que sube a Serrella por la vertiente sur desde la carretera CV70, por aquí podemos subir cómodamente y quedar como Dios sin más problema. Ya se, ya se, no es lo mismo pero…
Equipo el normal, calzado apropiado por favor (aquí no me pongo las Converse), agua, comida, bastones, y….gorra y crema solar, jajaja, si, este improvisador que soy se puso la primera vez en la mochila la gorra y se dejó en casa la crema solar, al final toda la cara quemada porque la gorra se quedó en la mochila. La semana pasada cogí la gorra y la crema solar, y el resultado el cuello quemado porque aunque me puse la gorra no saqué la crema solar….y eso que la llevaba a la espalda. Y una última cosa, los músculos que mueves montando en bici no son los mismos que utilizas para subir una montaña, jajaja, lo puedo asegurar, ay, ay.
Un entorno un tanto misterioso con esa especie de niebla, en realidad un escape en la tubería de agua que repartía por el ambiente una nube de pequeñas gotas de agua
Cartel desde donde se bifurcan los caminos, hacia los Frares y hacía el Pla de la Casa
No es muy buena esta foto pero está tomada encima de la pared de piedra que nos encontramos en la subida (también se puede pasar por uno de sus lados según alguna de las crónicas que he leido).
Algunas referencias que nos encontramos por el camino
Vistas desde la Peña Les Creus.
Pico Serrella
Font Roja
